Joseíto Acosta
José Vicente Acosta Díaz

Lo que define nuestra consciencia es la capacidad de observación, eso es lo que debemos ampliar... La Observación.

A más observación, más capacidad de ser nosotros mismos...

A veces, cuando hacemos observaciones o nos las hacen de lo mismo, de manera diferenciada o ampliada, nos vemos en la difícil y comprometida situación de ser juzgados e incluso crucificados, o bien jueces y verdugos... por el resto o por nosotros mismos. Nos sentimos errados, tontos, estúpidos... cómo es posible que no nos hayamos dado cuenta... Activamos nuestra defensa, estamos en estado de alerta, zona roja... Somos vulnerables al miedo atroz de que los demás por eso no nos acepten...

¿Son los demás o somos nosotros?... ¿Es la no aceptación de ellos o el miedo nuestro a no aceptarnos?...
No nos gusta lo que hemos descubierto y no queremos aceptar haber sido o ser esos seres que nos acaban de mostrar... ¿Si no lo aceptamos podemos transformarnos? Ya sabemos que la respuesta es NO, lo que no se acepta no se tiene y lo que no se tiene no se puede transformar, nada podemos hacer sin la aceptación, solo seguir sufriendo.

La vida es proceso, no nos avergoncemos ni sintamos culpa, sé que es arduo, complicado, enrevesado en ocasiones... Son olas internas de grandes dimensiones que se han desplazado a gran velocidad y en cualquier dirección, es un tsunami emocional que nos produce trastornos profundos e imprevistos y además de manera inesperada...

Debemos activar la transformación con los menos límites que seamos capaces y la menor resistencia, para abandonar el juicio al PROCESO del encuentro con nosotros, si queremos sufrir menos y así poder ordenarlo...
Aceptar que es así no es sinónimo de irresponsabilidad, hemos adquirido el conocimiento, debemos ser honestos y responsables con quienes elegimos ser a partir de ahí... Mirarnos a los ojos y ordenarnos en ese desorden vivido o que se vive, para desde ese encuentro integrarlo, convirtiéndolo en ACCIONES que nos definan, que definan quiénes somos y no nuestra necesidad de quiénes queríamos ser o tener...

Ahí es donde si queremos pedimos perdón si así lo sentimos y si para nosotros fuera necesario, porque ya nos perdonamos a nosotros mismos. Siendo conscientes que si todo es proceso el "daño" no existe porque es el proceso que nos lleva a nuestro interior, no hay otra manera, por tanto, el "perdón" tampoco, aunque así lo percibamos...

Cuando alguien nos amplía la observación, percibimos de manera distinta o la incrementa y nos REGALA una gran oportunidad, la oportunidad de adquirir consciencia, de evolucionar...

Continuemos amplificando la observación en nosotros y contemplaremos un MUNDO MEJOR.

La Observación sin Acción no produce Transformación, entonces actuemos siendo nosotros y crearemos lo que SOMOS...

#Gotitasdeagua888

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