Dada la situación en toda la geografía internacional, no puedo ser objetiva y, por ello, me es tan difícil centrarme para escribir un artículo medianamente bueno y que sirva para despertar conciencias. Muy dormidas me parece a mí que están, más de las que deberían.
Miremos para cualquier punto cardinal que miremos, las injusticias y el dolor del ser humano se repiten por doquier.
Mirando al Sur nos encontramos con una agónica África, Afganistán que se desangra, Argentina que siendo del sur ha perdido el norte y un rosario con muchas más cuentas.
Hacia el Norte es donde encontramos países desarrollados, económica y culturalmente avanzados, mas, ¿Acaso están exentos de injusticias y los hombres y mujeres no llegan hasta el suicidio por un sufrimiento que se les hace insoportable? Tenemos los países nórdicos, Japón, Corea del Sur y, especialmente, Estados Unidos abocado hacia la decadencia, siega los derechos humanos sin disimulo alguno.
Oeste, o países como Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda o la Unión Europea parecen a simple vista los más idóneos para vivir (así parece en comparación con el resto), pero no son tan inofensivos como creemos: el neocapitalismo, la globalización, la alienación y una corrupción generalizada provocan males incurables en demasiados ciudadanos.
¿Y al Este? Al Este tenemos a China, Corea del Norte, Ucrania, Bielorrusia, Rusia y también podemos elegir a Israel donde el ser humano no tiene ningún valor si no pertenece al “pueblo elegido por dios” (con minúscula porque un dios que elige a Israel como suyo no merece ser escrito con mayúscula). Maldigo a Israel una y mil veces por inhumanos, genocidas, soberbios e irrespetuosos con las reglas del juego acordadas por los países de la Tierra para que esta no sea una selva. Casi lo es.
Todo edificio se sostiene por los cimientos y las columnas, el mundo según la mitología griega, lo sostiene Atlas, como castigo por su rebelión contra su dios, Zeus, y el orden establecido. Los pocos hombres y mujeres buenos que existen son los que sostienen a esta sociedad que se está tambaleando siempre.
Israel debe de ser condenado por las matanzas de niños gazatíes, por bombardear a un pueblo desarmado e infringir las leyes internacionales.
Como una antigua griega, alzo la voz y grito: Israel es un pueblo bárbaro.
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