En una noche de frío glaciar

Mi cuerpo arde.

Todo lo vivido desaparece,

Se hacen olvido rostros y voces.

Una sombra deambula por mi mente

Adueñándose de mi risa y de mis juegos,

Y no habrá nadie que detenga la oscuridad,

Cuando los años hayan succionado mi identidad

Y sea tan solo una anciana olvidada,

Como una silla,

O como un armario vacío de vivencias.

Alzheimer y vejez,

Terror de todos mis Halloween...