Frutos

 

 

 

 

Por siempre

Cual fruto desgajado, así cayó. Añicos en el alma.

Sangra la carne, gime la piel.

Y el mundo… ¿gira? Alaridos desgarran la oscuridad.

Silencio. Silencio sepulcral.

 

Soledad

Estoy sola y ¿por qué tanto silencio? Compañero ¿dónde estás?

Te busco y no te encuentro ¿Acaso te fuiste sin mí? ¿Y yo?

Sola, triste y afligida, en mi mecedor sentada recordando aquellos día

cuando era feliz teniéndote a mi lado.

Mi vereda se acorta, pongo un pie y no recuerdo haber puesto el otro…

Tal vez, igual me fui y ni yo misma lo sé.